Edición dedicada a Serguéi Rachmaninoff

XXV EDICIÓN 2023 

Edición dedicada a Serguéi Rachmaninoff


Serguéi Rachmáninoff (1 de abril de 1783, Oneg  – 28 de marzo de 1943, Beverly Hills), fue un destacado compositor, pianista y director de orquesta ruso, uno de los últimos grandes compositores románticos de la música clásica europea, considerado también uno de los pianistas más influyentes del siglo XX.

A Rachmaninoff se le considera un maestro de la composición de melodias para piano, su música se ha mantenido por muchos años en favor del público en general, sus composiciones han sido reconocidas y apreciadas por su romanticismo y la pasión y las emociones que transmiten.

Vivió en Rusia desde su nacimiento hasta 1917 excepto por un periodo breve entre 1906 y 1908 cuando vivió en Dresden (Alemania). Después del triunfo de la Revolución Rusa en 1917, emigró a Francia y vivió en París hasta 1920 cuando cambió su residencia por los Estados Unidos, en donde vivió hasta su muerte en 1943.

Rachmáninoff fue el cuarto de una familia de seis hermanos, de los cuales uno murió en sus primeros meses de vida. Sus primeras lecciones de música las recibió de su madre a los cuatro años. Ésta contrato a Anna Ornáskaya, maestra y recien graduada del Conservatorio de San Petersburgo, para que viviera con la familia y comenzara la enseñanza formal.

En 1882, debido a dificultades económicas, sus padres se mudaron a un pequeño apartamento en San Petersburgo donde a los nueve años comenzó sus estudios musicales en el conservatorio, en donde fue inscrito gracias a la ayuda económica de su abuela materna.

Gracias a la intervención de su primo Aleksander Ziloti, famoso compositor de la época, continuó sus estudios en el conservatorio de Moscú, bajo las enseñanzas de Nikolái Zverev, que duraron hasta 1888.

En el otoño de 1885, Rachmáninoff se mudó con Zvérev y permaneció casi cuatro años. Después de dos años de clases, Rachmáninoff, de quince años, recibió una beca Rubinstein y se graduó en la división inferior del Conservatorio para convertirse en alumno de Ziloti en piano avanzado.

En 1889, Rachmáninoff y Zvérev rompieron relaciones. Rachmaninoff se marchó a vivir definitivamente con su tia Bárbara en 1889, a la edad de dieciséis años.

A lo largo de los dos años siguientes, Rachmaninoff se dedicó a componer pequeñas piezas, y tomó sus primeros contactos como director de orquesta. Asimismo, en 1891, compuso el Primer concierto para Piano y Orquesta, dedicado a su primo Aleksander Ziloti, y la ópera Aleko, que le sirvió para graduarse en el Conservatorio de Moscú con menciones honoríficas.

Rachmaninoff publicó sus primeros trabajos y, junto a las ganancias por las clases que impartía, obtuvo la independencia económica de su familia. Durante esta época, Sergei compondría sus primeros preludios y elegías para piano, así como el poema sinfónico La Roca.

Durante los ocho primeros meses de 1895, Rachmaninoff estuvo trabajando en su Primera Sinfonía, en la que volcó grandes ilusiones y esperanzas. Se estrenó por primera vez dos años después, en 1897, bajo la dirección del también compositor Aleksander Glazunov. El acontecimiento fue un rotundo fracaso. Glazunov tuvo muy mala dirección, y la ejecución de la orquesta fue nefasta, lo cual, junto con la dureza de la crítica, afectó seriamente el ánimo del joven compositor, cayendo en una profunda depresión que duraría tres años, durante los cuales no compuso nada. 

En  1897, fue nombrado director de la Compañía de Ópera de Moscú. Tras un exitoso debut dirigiendo Sansón y Dalila de Camille Saint-Säens, su fama fue extendiéndose por toda Europa, hasta el punto de recibir una oferta de la Royal Philarmonic Society de Londres para interpretar y dirigir alguna de sus propias obras.

En 1900 sintió que «comenzaron a surgir nuevas ideas musicales» y reanudó con éxito la composición. Rachmaninoff comenzó a escribir los primeros bocetos de unas de sus obras maestras, el Concierto para piano y orquesta n.º 2, tocó el segundo y tercer movimiento en Moscú en diciembre de ese mismo año, añadió el primer movimiento en la primavera de 1901 y ofreció la primera interpretación completa el 27 de octubre de ese mismo año con un inmenso éxito de crítica y público.

En medio del éxito de su carrera profesional, Rachmáninoff se casó con su prima Natalia Satina el 12 de mayo de 1902. Debido a que la Iglesia Ortodoxa prohíbe los matrimonios entre primos, este enlace generaría muchos problemas. Afortunademente para Rachmaninoff, la intervención de una de sus tías y la celebración de la ceremonia en una capilla militar hicieron oficial su matrimonio. Eran sin duda los mejores tiempos para el artísta.

Comienza aquí su triple carrera, como compositor, pianista y director, que le llevaría a adquirir una fama sin precedentes. Fue director del Teatro Bolshoi de Moscú, entre 1904 y  1906, y realizó varias giras por todo el mundo como pianista.

A esta etapa de su vida pertenecen sus obras más grandiosas: además del mencionado Concierto para piano y orquesta n.º 2, Rachmaninoff escribiría obras maestras como su Segunda Sinfonía (1907), La isla de los muertos, y sus Concierto para piano y orquesta n.º 3 y n.º 4 (1909), Las campanas (1913), y numerosas piezas para piano, entre las que se encuentran sus preludios para piano y la suite para dos pianos.

En noviembre de 1906, Rachmáninoff y su familia, cada vez más descontentos con la agitación política en Rusia, se marcharon de Moscú a Dresde (Alemania). 

En otoño de 1909 inició su primera gira estadounidense ofreciendo, como él mismo señaló, casi un concierto diario durante tres meses enteros. Estrenó su tercer concierto para piano el 28 de noviembre en el New Theater de Nueva York bajo la dirección de Walter Damrosh. En enero de 1910 lo repitió en el Carnegie Hall esta vez bajo la dirección de Gustav Mahler que impresionó enormemente a Rachmaninoff como director.

En 1916 explota la tensión acumulada en su país y tiene lugar la Revolución Rusa y Rachmaninoff decide abandonar su país. El día en que comenzó la Revolución de Febrero de 1917 en San Petersburgo, Rachmáninoff realizó un recital de piano en Moscú en ayuda de los soldados rusos heridos que habían luchado en la guerra. Dos meses más tarde, visitó Ivanovka, donde encontró la casa en un caos. A pesar de haber invertido la mayor parte de sus ganancias en la finca, Rachmáninoff se fue después de tres semanas y prometió no volver nunca. 
Sin dinero ni posesiones el artista emigra con su familia en otoño de 1917, a sus cuarenta y cuatro años. Ya en 1918, y asentado en París, Rachmaninoff recibe tentadoras y lucrativas ofertas  desde  Estados Unidos, que supondrían la salida económica para él y su familia.

Tras aceptar varias ofertas sobre giras de conciertos, firma en 1920 un importante concierto con la compañía de grabaciones “Víctor Talking Machine”, y al año siguiente compra una casa en Riverside Drive, Nueva York.

En 1921 Rachmaninoff se asienta definitivamente en Estados Unidos junto a su familia, dedicándose fundamentalmente a su faceta de intérprete en giras por EE.UU.

De este periodo inicial en los Estados Unidos, destacan las excelentes Tres canciones rusas (1926), 42 variaciones sobre un tema de Corelli (1931), la impresionante Rapsodia sobre un tema de Paganini (1934), su Tercera Sinfonía (1936) y algunos arreglos para piano.

En 1940 escribiría las Danzas sinfónicas, una de las obras maestras de la música de nuestro siglo. Asimismo, en 1941 revisaría su Concierto n.º4 para piano y orquesta.

En 1942 Rachmaninoff realizó su última gira de conciertos, y se compro una casa en Beverly Hills, que sería su última residencia. Allí murió el 28 de marzo de 1943, a la edad de 70 años, víctima de un cáncer tardíamente diagnosticado.


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